Cuarenta años después el Santfeliuenc regresó al egarense feudo de Ca n'Anglada. El regreso a un estadio que se encuentra en construcción no fue propicio y nos volvimos para casa sin puntuar. La apuesta ofensiva de Andrés González no pudo dar sus frutos ante la portería de un San Cristóbal que da la medida perfecta de esta categoría exigente: buen trabajo defensivo, orden en el centro del campo y practicidad consumada. Aquí nadie regala nada y los puntos hay que ganarlos con mucha paciencia y aplicación. Esto es Primera Catalana y vencer a domicilio está carísimo. Sólo hay que echar un vistazo a los resultados de las tres últimas jornadas.
Nuestro objetivo está claro y aún estamos en fase de adaptación. Pensar otra cosa sería emprender un camino equivocado. Si el próximo domingo superamos al Tàrrega seguiremos en una media de puntos interesante. Como ya es habitual, reclamamos la respuesta de la afición para que este proyecto sea compartido.
Por cierto, estrenamos segunda indumentaria. Un traje rojo carmesí muy llamativo. No pudo estrenarse con una victoria pero oportunidades no le faltarán: Gramenet, Igualada, Banyoles...
El Santfe estrenó la segunda equipación de un llamativo rojo carmesí
Jordi Guarch i Dani Texeira pugnan por un balón aéreo
Dos imágenes de un campo que ofrecía un aspecto insólito. En pocos meses Ca n'Anglada se convertirá en un excelente estadio para este barrio de Terrassa
La grada de gol era uno de los pocos espacios habilitados para el público
Más de cuarenta años han tenido que transcurrir para que el Santfeliuenc vuelva a jugar en Ca n'Anglada
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